¿Cuándo se inició?
El Feng Shui es una técnica muy antigua, lleva practicándose en China desde hace más de cuatro mil años.
Al poner en práctica estas técnicas las personas buscaban que sus hogares, e incluso sus tumbas, estuvieran en lugares protegidos de las tormentas, de las inundaciones e incluso del calor excesivo.
Con el paso del tiempo el Feng Shui se tuvo también en cuenta no solo para ubicar la vivienda sino también para la distribución de las habitaciones y la colocación de los diferentes elementos de la vivienda desde la colocación de las puertas, ventanas o chimeneas hasta el diseño de los jardines.
¿En qué se basa?
Feng Shui, viento y agua, se basa en la premisa de que todos los objetos que forman parte de nuestro entorno tienen una influencia en nuestra vida. La forma en que fluya esa energía influirá en nuestra vida.
El Feng Shui trata de armonizar esa energía para que nuestra vida tenga buenos niveles de felicidad, prosperidad, salud y para que veamos todo de una forma más positiva.
Para ayudarnos a conseguir esa transformación en nuestro hogar o lugar de trabajo podemos utilizar algunos objetos que activarán el “chi” positivo contrarrestando el negativo. Estos objetos pueden ser plantas vivas, cristales, espejos, bambú y cualquier símbolo de que represente la buena fortuna.
Elementos y colores del Feng Shui
Los elementos del Feng Shui son cinco y cada uno de ellos está relacionado con unos colores.
Utilizar correctamente los colores nos puede ayudar a equilibrar la energía de nuestro hogar o de nuestro centro de trabajo.
Estos son los elementos y los colores que con ellos se relacionan:
- Madera: verde, marrón.
- Fuego: rojo, amarillo fuerte, púrpura, rosa, naranja.
- Tierra: amarillo claro, marrón claro, arena.
- Agua: azul, negro.
- Metal: blanco, gris.
Aplicaciones
Son muchas las aplicaciones que tiene el Feng Shui pues se puede utilizar para:
- Decidir la ubicación de un edificio.
- Elección de los materiales que se usarán en la construcción.
- Características arquitectónicas del edificio.
- Estilo de los muebles.
- Colores que se usarán para pintar los diferentes espacios.
- Ubicación de objetos decorativos.