¿Desde cuando se empezó a interpretar los sueños?
La historia de los sueños y su intento de interpretación han de ser tan antiguos como la propia conciencia humana. La Biblia está llena de ejemplos; como los sueños de José (Génesis) y su capacidad interpretativa sobre los que luego le sucederían al faraón de Egipto.
¿Qué base tiene la interpretación de los sueños?
¿Cómo interpretar los sueños? ¿Todos podemos interpretarlos? Últimamente sueño bastante con mi padre. Él aparece en la escena con indumentaria deportiva y elegante, todo de blanco, pareciendo el potentado propietario de un yate atracado en el puerto de la ciudad. Como si haciendo una travesía de placer hubiera parado un rato a visitarme.
Un sueño comprensible partiendo del hecho de su reciente fallecimiento y nuestro respectivo cariño; pues esto es lo que sabemos con seguridad sobre los sueños, que casi siempre están relacionados con nuestras emociones.
Y el hecho de que proliferen interpretaciones generalizadas es debido a que muchas tensiones emocionales son bastante comunes; el deseo de cariño, de dinero, de seguridad, de logros especiales..., el temor a perder alguna de tales cosas...
Pero hay que tomar con cautela esa especie de catálogos de los sueños que nos ofrecen; pues, aún con preocupaciones comunes, cada persona tiene su particular sensibilidad emocional. En realidad, con un poco de paciencia y habilidad, todos podríamos saber que significan los sueños.
¿Realmente existen los sueños premonitorios?
Muchas experiencias nos hablan de sueños premonitorios que son como avisos de una oportunidad ventajosa o de un peligro. Charles Berlittz nos habla en "El mundo de lo insólito", por ejemplo, sobre la señora Ruth Ammer, que durante el sueño de una siesta tuvo la pesadilla de ver cómo un ladrón asesinaba a su marido en la tienda de su propiedad y luego lo encontró efectivamente muerto por unos atracadores.
También sabemos de sueños que son mensajes, unas veces clarísimos y otras encerrados en complicados jeroglíficos, para la solución de problemas que nos preocupan intensamente. Tal intensidad es lo que empuja la cuestión al ámbito de lo emocional en nuestra mente y de alguna mágica manera, el subconsciente encuentra y nos transmite una pista hacia su solución o la solución completa. Einstein hablaba de cierto sueño que le inspiró en el desarrollo de la teoría de la relatividad, en el cual se vio cabalgando sobre un rayo (velocidad de la luz) por el espacio.
¿Cual es el significado de los sueños?
Saber como interpretar los sueños es realmente complicado ya que estos misterios del subconsciente siempre están enraizados de alguna manera con nuestras emociones. A veces, como decía, su interpretación es fácil y otras muy complicada, pero lo que casi siempre resulta difícil es distinguir, por ejemplo, si el sueño es realmente un mensaje premonitorio o solo el reflejo emocional de ilusiones, añoranzas o temores.
La señora Ammer, como la mayoría de las personas cuando tienen pesadillas similares, no fue inmediatamente después de despertarse a visitar a su marido, lo hizo varias horas después al comprobar su tardanza. ¿Qué habría pasado si tras el sueño se hubiera dirigido a la tienda a advertirle? ¿Le habría hecho caso él?... ¿Habría cerrado el local o avisado a la policía?... ¿y la policía tomaría en serio la alerta de un sueño?... Seguramente no; incluso quizá su marido tampoco, permitiendo así la posibilidad de que ella también fuera asesinada. Esto es lo complicado, los sueños no se presentan con "etiqueta de autenticidad".
No soy muy aficionado a los juegos de lotería, pero en un par de ocasiones me desperté recitando en voz alta una serie de números que enseguida anoté y me apresuré a buscar. En ambos casos conseguí los números soñados; y en ambos casos también, se sucedió un curioso resultado: todas las cifras eran correctas, estaban en los números premiados, ¡pero colocadas en orden diferente!... Y es que el subconsciente nos manda mensajes, pero no siempre consigue que sean perfectos.
Como interpretar los sueños más habituales
Es cierto que existen sueños premonitorios, pero lo más frecuente es que la mayoría representen ilusiones, deseos contenidos o conflictos emocionales de cualquier tipo.
Mi padre se presenta en mis sueños impecablemente vestido, disfrutando de la lujosa y tranquila vida que refleja su aspecto y actitud, en escala de una navegación que es el eterno viaje de placer de su nueva existencia.
Y se me aparece así porque esa es la forma más acorde que el subconsciente ha encontrado entre los recursos de mi mente para, de alguna manera, hacer realidad mi deseo de que él, allá dónde esté, en esa otra desconocida dimensión, se encuentre bien y feliz.
Estas historias del subconsciente son una de las técnicas más sofisticadas de nuestra herramienta fundamental de supervivencia: el cerebro, cuyas amplias posibilidades son una rica selva de recursos para la existencia; en la cual, los sueños intentan ayudarnos, avisarnos o compensar la angustia de una realidad imperfecta, la desazón por nuestras carencias, errores, defectos, añoranzas, ilusiones y esperanzas.