Minerales
Los minerales son un tipo de nutriente que puede encontrarse en todo el espectro de nuestra alimentación, aunque predominan sobre todo en el reino vegetal. A grandes rasgos, una óptima nutrición mineral necesita de 16 minerales, 7 de los cuales se requieren en cantidades algo mayores (macrominerales) y 9 en cantidades traza (microminerales)
Macrominerales: azufre, potasio, calcio, cloro, sodio, magnesio y fósforo.
Microminerales: hierro, zinc, yodo, selenio, cobre, flúor, cromo, molibdeno y manganeso.
Propiedades de los minerales
Son muchas las propiedades de los minerales y muchos los beneficios que nuestro organismo obtiene de ellos.
Vamos a conocer las propiedades de algunos de estos minerales tan necesarios para un buen funcionamiento de nuestro cuerpo:
- Cobre: entre otras muchas propiedades el cobre interviene también en la formación de la melanina y es usado tópicamente en problemas de piel como el acné o como uso de tónico facial. También actúa como antioxidante y forma parte de numerosos enzimas.
- Zinc: juega un papel vital en numerosas funciones corporales. Forma parte del crecimiento celular, en docenas de reacciones enzimáticas y en la expulsión del dióxido de carbono, tan perjudicial para nuestra salud.
- Cromo: es indispensable para el organismo ya que regula el metabolismo del azúcar (glucosa) además de ayudar a la insulina a distribuir la glucosa a las células. Por eso es indispensable en el tratamiento de las hipoglucemias.
- Magnesio: es un tranquilizante natural que mantiene el equilibrio energético en las neuronas y actúa sobre la transmisión nerviosa, manteniendo al sistema nervioso en perfecta salud. Ampliamente recomendado para los tratamientos antiestrés y antidepresión.
- Potasio: está Íntimamente relacionado con el sodio y el cloro, desempeña un papel en la mayoría de las funciones vitales. Regula el contenido en agua de las células y su movimiento, impidiendo la fuga.
- Calcio: mineral que más abunda en el cuerpo humano y se necesita en cantidades importantes. Desempeña múltiples funciones fisiológicas. La función más importante del calcio es la construcción de los huesos.
- Fósforo: componente importante del ADN, forma parte de todas las membranas celulares sobre todo en los tejidos cerebrales.
- Sodio: en colaboración con el potasio, regula el equilibrio de los líquidos. Contribuye al proceso digestivo manteniendo la presión que ejercen 2 líquidos o gases que se extienden y mezclan a través de una membrana permeable o un tabique (presión osmótica)
- Boro: colabora en el buen mantenimiento y desarrollo de los huesos siendo, pues, muy recomendable en caso de osteoporosis, artritis, descalcificación y diferentes problemas osteoarticulares.
- Hierro: interviene en el buen funcionamiento de la respiración. Se combina con proteínas para formar la hemoglobina (pigmento rojo de la sangre) y así poder transportar el oxigeno a los tejidos. El hígado, el bazo y los huesos acumulan la mayor parte restante.
- Selenio: es un gran antioxidante que, al proteger las células de los “radicales libres”, interviene manteniendo la salud celular y evitando su degeneración.