
Hiperhidrosis o transpiración excesiva
La transpiración excesiva o hiperhidrosis es el incremento de la sudoración en las zonas del cuerpo donde hay más glándulas sudoríparas como la cara, las manos y los pies, y las axilas, sin que se presente un estímulo que lo provoque como pudiera ser el ejercicio físico.
Existen diferentes tipos de hiperhidrosis:
- Generalizada o sistémica: el sudor afecta a toda la superficie del cuerpo.
- Localizada o emocional: el sudor afecta zonas determinadas del cuerpo.
- Idiopática: el exceso de sudoración es de causa desconocida.
- Patológica: puede ser resultado de otras enfermedades.
El estrés y la ansiedad pueden provocar esta sudoración excesiva denotando su origen psicógeno. Cuando se produce a nivel general de todo el cuerpo suele ser debido a la fiebre. También puede ser un síntoma secundario de otras enfermedades como el hipertiroidismo.
La hiperhidrosis puede afectar notablemente a la calidad de vida de la persona que la padece, con una importante repercusión en problemas de autoestima, aislamiento social y ansiedad.
Causas de transpiración excesiva
La sudoración es un mecanismo totalmente natural que ayuda al organismo a mantener estable su temperatura interna (homeostasis) y es fundamental para eliminar toxinas. Las personas sudan más con temperaturas altas, al practicar deporte o en respuesta a situaciones de nerviosismo, furia, vergüenza o miedo.
No obstante, la transpiración excesiva aparece sin que se den tales detonantes. Las personas con hiperhidrosis tienen glándulas sudoríparas muy activas.
Si la transpiración excesiva afecta a manos, pies y axilas, se conoce como hiperhidrosis primaria o focal y afecta alrededor del 2-3% de la población en los países desarrollados y, con una demostrada tendencia a presentarse en varios miembros de una misma familia.
Las causas que provocan la hiperhidrosis o transpiración excesiva son desconocidas, pero se piensa tiene un origen nervioso y puede ser debida a un incremento de actividad del sistema vegetativo simpático.
La hiperhidrosis puede provocar un gran malestar personal, tanto a nivel físico como emocional.
En el caso de que la sudoración ocurra como resultado de otra causa médica, se le denomina hiperhidrosis secundaria.
Síntomas
El principal síntoma de la hiperhidrosis o transpiración excesiva es la humedad causada por el aumento de la sudoración.
Las zonas corporales más afectadas suelen ser las axilas, las palmas de las manos y las plantas de los pies, la cara, las mamas y el pubis.
Diagnóstico
El diagnóstico de hiperhidrosis es subjetivo. El paciente es en la mayoría de los casos quién nota como, a diferencia de otras personas, tiene una transpiración excesiva sin razones aparentes y en mayor proporción a lo que es considerado normal.
Se puede establecer a partir de la historia clínica y un examen físico del paciente. Además, pueden realizarse pruebas electrofisiológicas para identificar alteraciones funcionales.
Enfermedades o afecciones que causan hiperhidrosis secundaria
Estas enfermedades pueden causar la aparición de hiperhidrosis secundaria:
- Ansiedad crónica.
- Menopausia.
- Cardiopatía.
- Accidente cardiovascular.
- Lesiones en la médula espinal.
- Procesos infecciosos como la tuberculosis.
- Enfermedad de Parkinson.
- Trastornos en la regulación de los niveles de glucosa.
- Algunos medicamentos y drogas.
- Hipertiroidismo.
- Cáncer.
Remedios naturales
Algunos productos naturales que ayudan a combatir el sudor son:
- Fitoterapia:
- Salvia: poner una cucharada de salvia en una taza con agua hirviendo y tomar antes de cada comida.
- Azahar: realizar infusiones de flor de naranjo con propiedades tranquilizantes y relajantes.
- Tila y Valeriana: por sus propiedades sedantes.
- Hojas de nogal: ayudan a regular la producción de sudor y, tienen propiedades antisépticas y astringentes. Se cuecen las hojas del árbol y se aplica el agua de cocción en forma de compresas.
- Limón: aplicar zumo de limón en la zona de excesiva sudoración.
- Vinagre de manzana: tomar una cuchara en ayunas.
- Homeopatía: Nitricum acidum, Antimonium crudum, Sambucus, Sanguinaria, Sulfur entre otros, son remedios homeopáticos para distintos síntomas y características generales de tipos de hiperhidrosis.
Recomendaciones
La transpiración excesiva o hiperhidrosis puede ser la señal de una enfermedad grave.
Es importante consultar con el médico si:
- La sudoración es excesiva, inexplicable y prolongada.
- La sudoración se acompaña de dolor u opresión a la altura del pecho.
- La sudoración se acompaña de una notable pérdida de peso.
- La sudoración se produce más frecuentemente en el período de descanso y sueño.
- La sudoración se acompaña de dolor torácico y dificultades respiratorias acompañadas de fuertes y rápidos latidos cardíacos y pérdida de peso. Todos estos síntomas pueden ayudar al diagnóstico de hipertiroidismo.