
Esta maravillosa fruta posee una piel dura y de un tono amarillento rojizo, guardando en su interior una gran cantidad de semillas cubiertas por una pulpa carnosa, jugosa y de un color rosado. Este artículo nos da a conocer las muchas propiedades de la granada.
Propiedades de la granada
Las propiedades medicinales de la granada son, en gran parte, gracias a sus polifenoles y sus flavonoides, y a continuación os explico las más importantes:
Antioxidante: la granada es considerada una fuente natural para combatir el envejecimiento celular. Lo que hacen las sustancias antioxidantes como los flavonoides, es captar unas sustancias toxicas y que son nocivas para el organismo.
Un vaso de zumo de granada tiene más antioxidantes que el vino tinto, el té verde o los arándanos.
Protege el sistema circulatorio y reduce el colesterol: una de las propiedades de la granada más importantes es la de proteger nuestra salud cardiovascular. Sus efectos antioxidantes y antiinflamatorios mejoran el flujo sanguíneo y ayudan a eliminar el colesterol malo de nuestro cuerpo, llegando así a reducir la presión arterial.
Protege nuestra piel: las granadas ayudan a oxigenar las células de la piel gracias a su alto contenido en hierro, y el extracto o jugo de granada promueve la regeneración de la dermis, siendo especialmente efectivo en los casos donde la piel se ha visto afectada por el sol.
Antiinflamatoria: una de las propiedades de la granada más potentes es su poder antiinflamatorio, llegando a reducir la inflamación de las articulaciones. Esto favorece y retarda la aparición de la artritis, y al ayudar a que no se deterioren los cartílagos, reduce la aparición de osteoporosis.
También puede reducir la inflamación del sistema digestivo, por lo que su consumo beneficiará a quienes padezcan digestiones pesadas o dolores abdominales después de las comidas.
Anticancerígena: el extracto de la granada tiene la propiedad de inhibir el crecimiento de células cancerosas y activar enzimas que desintoxican al hígado de sustancias dañinas. Los estudios que se han realizado por ahora, son sobre cáncer de próstata y de mama.
Antidiabética: el bajo índice glucémico que tienen las granadas las hacen especialmente indicadas para los diabéticos.
Depura los riñones: otra de las propiedades de la granada es gracias al alto contenido en potasio que tienen, que ayuda a limpiar los riñones, favoreciendo así a la limpieza de nuestro organismo.
Actúa frente a la disfunción sexual: las granadas tienen la propiedad de ser vasodilatadoras, aumentando así la circulación sanguínea, y pudiendo llegar a favorecer la erección.
Ayuda a combatir infecciones: los compuestos de la granada tienen propiedades antibacterianas y antifúngicas, ayudando a combatir infecciones por algunas bacterias y hongos.
Aporte nutricional de la granada
La granada es una fruta con un bajo aporte calórico ya que apenas contiene carbohidratos, y destaca por su alto aporte en potasio, fundamental para el buen funcionamiento de los sistemas muscular y neurológico.
Sus principales nutrientes, contenidos en 100 g de granada y de los cuales comestibles son 35 g son:
- Energía: tiene bajo aporte energético (34 kcal).
- Hidratos de carbono: como el resto de frutas, es el mayor macronutriente que hay en la granada, siendo del 89 %, frente al 7 % de la proteína, y el 4 % de las grasas. Contiene 7,5 g.
- Vitamina C: además de aportar un alto contenido en esta vitamina, el ácido cítrico de la granada, potencia su acción. Contiene 5,7 mg.
- Potasio: como he comentado, es muy rica en este mineral. Contiene 247 mg.
- Fibra: 0,2 g.
- También contiene vitaminas K, B6, A, y otros minerales.
Por último, cabe destacar su alto contenido en taninos, unos compuestos que le aportan a la granada sus propiedades antioxidantes y antiinflamatorias.
Pero que a la vez también pueden hacen disminuir la absorción de nutrientes como el hierro, por lo que no es conveniente consumirla en casos de anemia ferropénica.
La granada a nivel culinario: como consumirla para aprovechar todas sus propiedades
A la hora de comprarlas, es importante elegir aquellas granadas que tengan un color más amarillento, con matices marrones, la piel fuerte y sin cortes, y cuanto más pese, más jugosa estará.
La granada es una fruta que podemos consumir de dos formas:
- Fresca, tanto sola como en ensaladas, yogures, helados, etc…
- En zumos, sola o con otras frutas como naranja, manzana o zanahoria.
Para comerlas lo mejor es partirla por la mitad y para sacar las semillas será suficiente golpear la cascara con una cuchara; verás que van saliendo solas. Otra manera es cortarla en cuatro cuartos e ir sacando las semillas.
Puedes conservarla a temperatura ambiente, y una vez abierta si debes consumir sus semillas rápidamente o guardarlas en la nevera dentro de un recipiente durante tres días o congelarlas un máximo de seis meses.
Otros datos curiosos sobre la granada
- Aunque la granada ha sido cultivada por miles de años en el Mediterráneo y África, en realidad es originaria de Oriente, entre Irán y las montañas del Himalaya en la India. Allí es conocida como símbolo de amor y fecundidad.
- Los antiguos egipcios eran enterrados con granadas.
- El jugo de la granada mancha los tejidos permanentemente.
- Antiguamente, las personas de tez muy blanca utilizaban su jugo para dar vigor al cutis.
- Su corteza es empleada en Marruecos para hacer pieles y en Túnez para teñir de amarillo los tejidos y otras fibras.