
¿Qué es el nabo?
El nabo es una raíz de la familia de las crucíferas. Hay muchas variedades, unas 3.000 especies diferentes.
Entre sus muchas variedades cabe destacar: el nabo daikon, nabo de mayo, nabo de otoño, nabo stanis o nabo el nabito teltow.
La mejor época para consumirlos es en los meses de otoño aunque hoy día los podemos encontrar en los mercados en cualquier momento del año.
Información nutricional del nabo
Contiene un 4,43 % de hidratos de carbono, un 0,9% de proteínas y un 0,1% de grasas. En cuanto a energía, sólo aporta 27 Kcal/100 g.
En cuanto a vitaminas destaca una gran cantidad de vitamina C.
Pensemos que 100 g de nabo contienen 21 mg de esta vitamina, más de la tercera parte de las necesidades de un adulto. También aporta fibra, mucho potasio, algo de sodio y otros oligoelementos.
Sus hojas, también llamadas grelos, contienen 190 mg de calcio (por cada 100 g) Es, pues, la verdura más rica en este mineral e incluso tiene más que la leche. También aportan mucha fibra, provitamina A, vitamina C, folatos y hierro.
Propiedades del nabo
Conozcamos las propiedades del nabo que lo hacen tan recomendable para cuidar nuestra alimentación:
- Dentro de las propiedades del nabo destaca la capacidad que tiene para eliminar el ácido úrico de la sangre a través de la orina, por eso es muy útil en casos de gota.
- Gracias a su escaso contenido de grasa y a su aportación de fibra es ideal en tratamientos para la obesidad.
- Facilita la digestión de alimentos fritos o grasos ya que favorece su metabolismo por parte del hígado. Para ello podemos acompañar estas comidas con un par de cucharadas soperas de nabo rallado crudo.
- Ideal para eliminar el exceso de líquidos y grasas del cuerpo (tomado en forma de sopa o infusión)
- Una de las importantes propiedades del nabo es su alto contenido en antioxidantes, vitaminas y minerales.
- Su aporte de calorías es muy bajo así como el de hidratos de carbono.
- Otra de las propiedades del nabo es que ayuda a mejorar el tránsito intestinal.
- Es muy diurético por lo que nos ayuda a eliminar toxinas y reducir la retención de líquidos.
Como consumirlos
Las hojas se pueden consumir crudas, por ejemplo en una ensalada, o cocidas junto a patatas o en tortilla.
La raíz de el nabo se puede consumir rallada en ensaladas como si fueran rabanitos o cocinadas con arroz o legumbres. También se pueden añadir a los ingredientes para elaborar caldos porque resulta muy remineralizante.
¿Sabías que el nabo también es bueno para la higiene personal? De hecho, el jugo de nabo es realmente efectivo para evitar el olor corporal. Ralla un nabo, exprime el jugo y luego aplícalo a tus axilas.
El nabo también puede ayudar a reparar la piel agrietada y rasgada de tus pies. Simplemente hierve por lo menos 12 nabos, incluidos las partes verdes, en agua. Antes de irse a la cama, sumerja los pies en esta solución (deje que se enfríe primero) durante 10 minutos. También puedes frotar los nabos en las plantas de tus pies. Continúa haciendo esto por tres días y notarás que tu piel se vuelve más suave.
Siguiente artículo » Propiedades del tomate