
Hay una frase de Robert Baden-Powell que resume a la perfección lo que yo entiendo por detox: “no es más limpio el que más limpia, sino el que menos ensucia” y esto se puede extrapolar a muchos ámbitos de nuestra vida.
Actualmente estamos en una época histórica en la que podemos tener multitud y cantidad de productos procesados en nuestro plato sin hacer apenas ningún esfuerzo, sin ni siquiera salir de casa.
Productos hechos para deleitar nuestro paladar y nuestro cerebro y volvernos adictos a ellos, independientemente de sus efectos sobre la salud. Ante esta situación nos encontramos en muchas ocasiones con la necesidad de limpiar, detoxificar, eliminar, quemar, etc. Y triunfan más las dietas milagro y detox de 2 semanas que los cambios de hábito a largo plazo.
¿Porqué sucede esto?
Porque nos estamos saltando una parte muy importante en esta ecuación del cambio, y es cambiar nosotros. Si nosotros no cambiamos, por muchas dietas detox que hagamos rápidamente volveremos a ensuciar, y así estaremos toda nuestra vida.
En este post voy a invitarte a realizar un cambio profundo y a explicarte porque des de mi punto de vista lo importante no es limpiar, sino no ensuciar.
¿Qué son las dietas detox?
Desde luego que las dietas detox no son algo nuevo. Ya se hacían hace muchísimos años, y se siguen haciendo en ciertas culturas, mediante ayunos o retiros espirituales.
Estos retiros por ejemplo pueden servir para ayudar a depurar el organismo en todos los niveles y dejar que entren ideas y pensamientos nuevos. Realmente tiene múltiples beneficios. Pero las dietas detox como las entendemos aquí “en la ciudad” no son exactamente lo mismo.
Utilizamos las dietas detox como compensación por cantidades excesivas de tóxicos alimentarios y ambientales que en la mayoría de los casos somos 100% libres de elegir (hay excepciones, como aire, agua, etc. que a veces no podemos controlar).
Y creemos que con dos semanas de desintoxicación estamos compensando meses o incluso años de mala alimentación, para luego volver al camino anterior de nuevo ¿enserio nos creemos eso? ¿No sería más inteligente no tener que limpiar? ¿consumir siempre alimentos que nos aporten un efecto positivo sobre nuestro organismo, que no nos saturen, que no nos enfermen? ¿que no aporten tóxicos que necesiten ser eliminados mediante dietas extremas?
¿No sería mejor limpiar desde la salud y no desde la enfermedad? es muy diferente, si sigues leyendo explicaré el porque?
Efectos de las dietas detox
Cuando hacemos detox, muchos tóxicos que tenemos acumulados en nuestro organismo, pueden pasar a sangre más fácilmente para ser eliminados ya que estamos parando de ensuciar.
Pero esto nos puede traer problemas.
Si hago el detox desde la enfermedad, si soy una persona que llevo comiendo mal muchos meses o años y justo después de un último atracón navideño decido cortar el rollo drásticamente y limitarme a no comer/beber más que zumos durante dos o cuatro semanas los efectos de las dietas detox pueden ser:
- Que tenga un terreno muy fuerte y que no haya acumulado grandes cantidades de tóxicos y que disfrute de los beneficios de esta desintoxicación para luego coger unos hábitos de no ensuciar.
- O que sea una persona que tiene una carga tóxica muy elevada con un terreno algo deteriorado y enferme durante esta desintoxicación, por la elevada cantidad de tóxicos liberados a sangre, imposibles de gestionar por el organismo.
Vamos que es un poco como jugar a la lotería, y mirando a largo plazo, comer mal siempre y hacer 1 o 2 épocas detox al año, no sirve para nada.
Ahora bien, ¿cuáles son los efectos de las dietas detox desde la salud y los buenos hábitos?
Ahí la cosa cambia, ya que la cantidad de tóxicos que tendremos acumulados es mucho menor y la capacidad de aprovechar los efectos de las dietas detox beneficiosos es mucho mayor. Desde la salud tiene más sentido, que una casa esté limpia no significa que no puedas hacer una limpieza a fondo de tanto en cuanto, pero está claro que será una limpieza mucho menos agresiva y fatigadora.
¿Que te propongo yo?
Cambiar tus hábitos, no esperes más, es lo mejor que puedes hacer para ti y para tus seres queridos, ya que somos ejemplo de la gente que tenemos alrededor.
Si tienes hijos, que mejor que vean a sus padres cuidándose para que ellos quieran hacerlo, lo mismo con madres, hermanos, amigos, etc. ¿Que al principio es difícil y te lloverán críticas? Sí, lo se, pero a la larga te darás cuenta que es una de la mejores decisiones que has tomado en tu vida.
A largo plazo si mantienes tu casa limpia no sentirás esa necesidad de hacer una dieta detox, no sufrirás por deshincharte y querer perder peso, será inevitable estar delgado, sano y vital.
Y desde ese estado, sí, desde ahí si es interesante realizar dietas detox que te den un plus dentro de tu estilo de vida saludable. Pero querer empezar la casa por el tejado no es buena idea, seguramente fracasará la construcción.
Siguiente artículo » Beneficios de las dietas bajas en FODMAP