
¿Por qué carne de laboratorio?
¿Por qué recurrir a la carne de laboratorio? Últimamente el tema de consumo acelerado de la carne ha sido un objeto de muchos debates. Hablamos de ello por razones medioambientales, éticas y por cuestiones de salud. Como la población de la tierra aumenta cada año con 1.05% , según las proyecciones en 2057 habrá 10 millones de personas en el mundo. Este aumento implica la expansión continua de tierras de cultivo para poder principalmente alimentar y aumentar el ganado. Al momento utilizamos 50% de las tierras de vegetación para cultivar y la producción de ganado es responsable del 14.4% de emisión de gases de efecto invernadero.
Otro motivo por el cual muchos cuestionan el consumo de carne es por la ética y el bienestar de los animales. La ganadería intensiva implica procedimientos que causan el sufrimiento de los animales, además de la calidad pobre de vida que pueden tener.
Cada vez más personas deciden seguir una dieta vegana o vegetariana o simplemente reducir su consumo de carne. Hoy en día existen muchas alternativas a productos de carnes como las salchichas de tofu, los productos que imitan el pollo o incluso hamburguesas vegetales que saben, huelen e incluso se ven igual a una hamburguesa de carne.
La carne de laboratorio es algo diferente. En este caso ya no se habla exactamente de un sustituto de carne sino un sustituto de carne que proviene de animales.
¿Cómo lo hacen?
La carne de laboratorio tiene muchos otros nombres como carne in vitro, carne sintética o carne artificial. El proceso es más simple de lo que suena y se trata del crecimiento de células del músculo en un serum de nutrientes. El proceso se inicia con algunas células madre que se obtienen de una pequeña muestra de tejido muscular del animal vivo. Estas células son capaces de transformar a otros tipos de células del músculo a través de la proliferación celular que significa la duplicación de las células cada pocos días.
Como el paso siguiente del proceso, facilitan que las células se enganchen a una estructura esponjosa que está llena de nutrientes . La misma estructura estira los músculos favoreciendo que se formen tiras como las fibras musculares de los tejidos vivos. Con este tipo de estimulación consiguen que el tejido muscular incremente su tamaño y contenido en proteína. Al final del proceso la carne está lista para ser utilizada en la cocina como cualquier carne natural.
El proceso se hace en un biorreactor que es una estructura con un ambiente que es capaz de mantener un medio biológicamente activo. Por el momento los laboratorios trabajan en cómo optimizar el tiempo de producción y así poder bajar el coste. La carne de laboratorio todavía no se ha comercializado pero podemos estar seguros que en unos pocos años la veremos en las estanterías de nuestras tiendas eco e incluso en los supermercados.
¿Será más caro que la carne de producción convencional?
Sí, seguramente, por un buen tiempo hasta que los gobiernos no empiecen a subvencionar la carne de laboratorio a la vez que la ganadería.
Con la tecnología de carne artificial será posible la creación de carnes combinadas de diferentes animales. Es posible que en unos años podremos probar una hamburguesa de panda y tiburón y el límite sólo será la imaginación.
También será posible la creación de carnes enriquecidas con diferentes vitaminas, la regulación de la relación grasa músculo incluso la introducción de vacunas.
Valores nutricionales de este tipo de la carne
La pregunta es: ¿Tiene la carne de laboratorio los mismos o incluso mejores valores nutricionales en lo que respecta a los macro y micronutrientes?
La carne de laboratorio tiene los mismos valores nutricionales que cualquier carne, incluso mejores si consideramos todos los residuos que podemos consumir comiendo carne de producción intensiva.
Ventajas de carne de laboratorio
- Evita el sufrimiento de los animales.
- No contiene antibióticos, restos de pesticidas, metales pesados y otros tóxicos. La producción intensiva de ganado como cordero y cerdo implican el uso de antibióticos en los animales para prevenir enfermedades.
- Su producción crea una huella ecológica mucho menor en comparación con la de carne de ganadería. 95% menos emisiones de gases de efecto invernadero, 45% menos uso de energía, 99% menos uso de tierras de cultivo y 80% menos uso de agua.
- Posible regulación de nutrientes como B12, Omega 3, minerales y proteína etc.
- No hay peligro de intoxicación por bacterias
Desafíos de la carne de laboratorio
- La primera hamburguesa in vitro que se presentaron valía 30.000 euros. Los científicos están trabajando en reducir el coste de la producción y en los últimos años lograron producir medio kilo por unos 1000 Euros. Según las estimaciones en algunos años podrán bajar los precios significativamente hasta que una hamburguesa valga unos 10 euros. Debido al precio más elevado no todos podrán permitirse su consumo. Por algunos años más seguirá siendo un producto de lujo.
- Requiere mucho menos trabajadores, es necesario adaptar a la tecnología
- Reservas de consumidores – la carne de laboratorio por su naturaleza artificial y origen puede ser repugnante para muchos consumidores
Aunque ahora todo esto parece inimaginable y un poco futurista la agricultura celular puede ser la solución para un consumo más sostenible y sin crueldad.