
¿Qué son los calambres?
Los calambres o espasmos musculares, son contracciones involuntarias y dolorosas, de uno o más músculos del cuerpo.
Son muy comunes en los muslos, pantorrillas, pies y manos, aunque pueden afectar a cualquier otro músculo. Es más frecuente que se den durante la noche, provocando un intenso dolor que se puede prolongar hasta varios minutos.
Causas de los calambres en los pies y piernas
La causa mas frecuente en la aparición de los calambres en los pies y piernas suele ser como respuesta a movimientos inusuales e inadecuados de los músculos, por esta razón se suelen dar en personas con trabajos físicos duros y repetitivos, en deportista esporádicos, y en adultos mayores de cuarenta años debido a la pérdida de masa muscular.
Otras veces, los calambres aparecen como consecuencia de un desequilibrio electrolítico por carencia de minerales y vitaminas.
Este puede ser debido a una deshidratación por una abundante sudoración durante la práctica de ejercicio físico, o incluso debido a un estado de vómitos y diarreas.
Otra causa probable es la insuficiente irrigación sanguínea en el músculo (a veces los calambres ocurren cuando hay mucha tensión y dolor en las lumbares). Por esta razón los problemas de mala circulación sanguínea o hipertiroidismo son factores de riesgo para la aparición de los calambres.
Dieta adecuada
La alimentación es clave para prevenir los calambres en los pies y piernas. Es importante tomar alimentos ricos en vitaminas y minerales, como son las frutas (especialmente el plátano y el kiwi por su alto contenido en potasio), legumbres y verduras (preferiblemente crudas o cocinadas al vapor), para evitar la pérdida de vitaminas durante la cocción.
La leche y derivados son también una importante fuente de vitaminas y minerales como el Calcio, el Potasio y el Magnesio, por lo que su consumo es muy recomendado. La leche no debe ser desnatada ya que las vitaminas de esta se encuentran el la parte grasa. La mas recomendada para personas sin problemas de sobrepeso es la semi-desnatada.
No deben faltar en una dieta adecuada para prevenir los calambres en los pies y piernas los cereales integrales. Pueden ser en forma de pan integral, arroz integral, harina integral, o cualquier otro cereal sin refinar. Estos alimentos ayudan al organismo a eliminar grasas y colesterol, que son moléculas que dificultan la circulación de la sangre.
Hay que evitar alimentos grasos de origen animal, reducir el consumo de carne, y de bollería industrial, ya que estos alimentos son ricos en colesterol y triglicéridos, y su consumo excesivo puede empeorar los episodios de calambres nocturnos.
También es muy importante para evitar los calambres beber abundante agua durante el día, en especial cuando perdemos mucho líquido por sudoración, y cuando las temperaturas son muy elevadas.
Fitoterapia para los calambres en los pies y piernas
Existen diferentes plantas medicinales para tratar los calambres en los pies y piernas, el Diente de león, el jengibre y el tomillo, son ideales para mejorar el riego sanguíneo ya que producen un efecto vasodilatador.
El extracto de Ginkgo Biloba aumenta la circulación sanguínea, con lo que se consigue una mejor irrigación de los músculos y se reducen los calambres repentinos, aunque su uso no es recomendable en periodos de embarazo o lactancia.
Plantas muy remineralizantes como la Cola de Caballo o la Ortiga también podrían ayudarnos.
Complementos para evitar los calambres musculares
Para evitar los calambres musculares es muy importante controlar la hidratación corporal y las sales minerales (Principalmente Potasio, Magnesio y Calcio). Las bebidas isotónicas son un buen aliado para después del ejercicio ya que contienen cantidades de sales minerales adecuadas para recomponer el equilibrio electrolítico del organismo.
Otros suplementos que pueden ayudar a prevenir calambres son la jalea real o la levadura de cerveza, que actúan mejorando la circulación de la sangre, para que esta llegue con mayor facilidad a los músculos ejercitados.
Un remedio popular que no suele fallar
Tomar un vaso de agua con una cucharada sopera de melaza de caña y otra de vinagre de manzana suele tener un resultado genial contra los calambres de los pies y piernas, o que se produzcan en cualquier otra parte del cuerpo.
Se puede tomar de una a dos veces al día. Es muy recomendable, especialmente, después de hacer un ejercicio físico importante. Sino, lo ideal es tomarlo antes de ir a dormir.
¿Sabías que…?
En las olimpiadas de Los Ángeles 1984, Gabriela Andersen, una atleta suiza, concluyó la Maratón deshidratada y con medio cuerpo paralizado a causa de los calambres. Cruzó la línea de meta haciendo eses y, aunque acabó en la posición 37, fue ovacionada por el público presente como si hubiese ganado, en la que fue la primera maratón femenina en unos juegos olímpicos.