
¿En qué consiste el ayuno terapéutico?
Desde tiempos pasados algunas civilizaciones ya eran devotos de esta práctica que fue utilizada con diferentes objetivos. Desde rituales para la fertilidad, fines, espirituales o terapéuticos, como en el caso de Aristóteles, Hipócrates y Platón, entre otros grandes pensadores y médicos de la antigua Grecia, que no dudaron en experimentar e investigar sobre sus bondades y promover el ayuno terapéutico por sus grandes propiedades y beneficios para la salud.
El ayuno terapéutico consiste en la supresión total o parcial de alimentos sólidos por un tiempo determinado en el cual se le otorga un descanso a nuestro cuerpo, con la finalidad de activar la depuración, favoreciendo procesos de limpieza y regeneración de los órganos, a los cuales ayuda a recuperar su función natural. Existen muchos tipos de ayunos de más o menos tiempo de duración y en función del fin que se pretenda conseguir.
Algunos beneficios del ayuno terapéutico
Veamos cuales son algunos de los beneficios del ayuno terapéutico que nos ayudarán sentirnos más saludables:
- Ayuda a eliminar toxinas del hígado y a depurar la sangre.
- Se dejan de consumir sustancias irritantes y eso favorece la reparación de la mucosa intestinal mejorando las digestiones.
- Descanso del páncreas y disminución de los picos de glucosa. Prevención y mejora en algunos casos de diabetes.
- Desinflamación del estómago. Ayuda a recuperar su ph natural.
- Activar la circulación general y fluidificar la sangre son también importantes beneficios de ayuno terapéutico.
- Estimula el sistema inmunitario.
- Otro de los beneficios del ayuno terapéutico es que notamos un incremento de nuestra energía.
- Ayuda a recuperar la memoria y la concentración. La mente está más lúcida.
Ejemplos de ayunos terapéuticos
Veamos algunos ejemplos de ayunos terapéuticos por los que podemos optar:
- Ayuno «0» o total: Este tipo de ayuno es recomendado en personas que han sufrido una pancreatitis aguda y necesitan dar un descanso a su sistema digestivo. Su tiempo de duración es de 40 horas en las cuales tiene que haber reposo absoluto y el único consumo que se admite es el agua.
- Ayuno parcial: Puede ser sólo de líquidos o de sólidos muy concretos.
- Ayuno líquido: Comprende jugos de frutas y vegetales naturales, infusiones de hierbas y caldos con acción depurativa.
- Ayuno sólido de frutas y verduras: Se potencian las frutas y ensaladas en época de más calor y en personas de naturaleza calurosa. En periodos de más frío o si la energía de la persona está debilitada, es aconsejable tomar los vegetales al vapor y cocinar ligeramente la fruta, además de agregar especias como la canela y el jengibre que ayudan a entrar en calor.
- Ayuno con mucílagos: Es un ayuno recomendado para regular el tránsito intestinal y eliminar toxinas. Éste tipo de fibra se encuentra en algunas semillas como el lino, la chía y la zaragatona. Se pueden añadir a los jugos y caldos del ayuno líquido y completar su acción.
El tiempo de duración puede variar entre 3 a 10 días si es ayuno líquido y hasta 15 días si es sólido. Ninguno de los dos exige reposo, salvo casos concretos donde pueda existir debilidad o alguna afección como la diabetes y la obesidad donde ha de haber un control más exhaustivo.
Inicio y salida del ayuno
Se aconseja realizar una transición para ir eliminando alimentos de forma progresiva:
- El primer día es aconsejable eliminar la proteína de las carnes y los lácteos. El segundo día del pescado y los huevos, el tercero las legumbres y frutos secos y el cuarto los cereales, si se tercia, ya que existen algunos ayunos que contemplan su consumo.
- Las solanáceas como el tomate, pimientos, berenjena y patata, se pueden eliminar desde el primer día de ayuno.
- Buena hidratación.
- Al salir del ayuno la reintroducción será en orden inverso a su eliminación.
Consideraciones generales
Aunque son muchos los beneficios del ayuno terapéutico debemos tener en cuenta las siguientes consideraciones:
- No realizar en caso de debilidad extrema, embarazo, lactancia, medicación y en caso de patologías hay que consultar siempre a un profesional.
- No centrar el objetivo en la pérdida de peso puesto que ese no es su fin y el peso perdido, se puede recuperar fácilmente con efecto rebote si no hay buenos hábitos en general.
- Pueden haber crisis curativas debido a las sustancias tóxicas que se movilizan en sangre para su eliminación y experimentar algunos síntomas de malestar.
- Se pueden dar bajones de energía debido a la baja ingesta. En tal caso hay que descansar y no forzar demasiado la actividad.
- Si el ayuno es muy largo conviene no realizar ejercicio físico y si es más corto la actividad puede ser normal.
- Si no hay buena tolerancia se recomienda abandonar esta práctica.
- Cada cuerpo y persona funciona de manera diferente por lo que se recomienda adaptar el ayuno según la energía y la evolución de cada persona.
El ayuno terapéutico es una práctica que ayuda a nuestro cuerpo a funcionar de forma más eficaz, pero para que haya una mejora real, el estilo de vida tiene que ser saludable, de lo contrario sólo es una ayuda puntual y más a corto o largo plazo el problema seguirá estando latente.
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